El avistamiento de aves en Costa Rica es una de las actividades turísticas más populares. No en vano, Costa Rica está considerada como uno de los 5 mejores lugares de avistamiento de aves en el mundo, debido sobre todo a la alta biodiversidad y la accesibilidad a los mejores puntos de observación de pájaros. Prepara tu mochila con tus mejores lentes, porque no dejarás de disparar tu cámara fotográfica.
A pocos kilómetros del centro de La Fortuna se encuentra la laguna artificial más grande del país. La laguna Arena es ideal para realizar recorridos en grandes lanchas acondicionadas para los turistas, para la pesca, o practicar esquí acuático. Asimismo, es conocido entre los especialistas y amantes del windsurfing, pues es el principal lugar del país donde se practica este deporte ya que los vientos alcanzan una velocidad promedio de 72 km/h y les permite desplazarse adecuadamente y disfrutar de esta aventura.
Puerto Viejo de Sarapiquí es una típica comunidad ribereña rodeada por bosques y plantaciones agrícolas, con una pintoresca arquitectura rural y numerosos puentes de hamaca. El río Sarapiquí tiene 84 km de longitud y se comunica con el río San Juan (fronterizo con Nicaragua), con Barra del Colorado y con Tortuguero. Desde el muelle del río podrás hacer actividades relacionadas con el avistamiento de vida silvestre. Cerca del pueblo de Sarapiquí podrás visitar la comunidad de Vara Blanca y Cinchona, donde contemplarás paisajes rurales muy hermosos combinados con densa vegetación. No debes perderte una visita a la Catarata de La Paz, una caída de agua de extraordinaria belleza.
La isla del Caño es sin duda una de las islas más bellas de Costa Rica. Está ubicada aproximadamente a 20 km de la Península de Osa, justo al noreste del Parque Nacional de Corcovado. Además de sus playas de arenas blancas y las cinco plataformas de arrecifes coralinos vivos, Isla del Caño constituye uno de los lugares arqueológicos precolombinos más importantes del país. Fue utilizado por sus habitantes como cementerio y lugar sagrado, donde se encontraron algunas de las esferas de piedra más de la isla.
Las esferas de piedra son un símbolo de identidad costarricense. Se han encontrado más de 300 esferas de piedra de varios tamaños, desde algunos centímetros hasta 2,5 metros de diámetro que datan de épocas precolombinas. Su excepcionalidad, su valor histórico y arqueológico viene dado por su número, su tamaño, su increíble perfección y su disposición en esquemas organizados y abstractos que no encajan en modelos naturales. Podrás observarlas en el Museo Nacional de Costa Rica en San José.
