Central Park es el pulmón verde de Manhattan, como dicen los neoyorquinos, otra ciudad dentro de Nueva York. Y es que, con sus 341 hectáreas, el parque es dos veces más grande que Mónaco y ocho veces más que la Ciudad del Vaticano. Mientras paseas por sus cuatro kilómetros de largo podrás encontrar praderas, lagos artificiales, cascadas y zonas que parecen un auténtico bosque. Sin duda, el lugar preferido por los locales para pasear, hacer deporte o tomar el sol.
Esta maravilla natural está formada por tres saltos (Horseshoe falls, American falls y Bridal Veil falls) que mueven un volumen de agua de 110.000 m³ por minuto, más que ninguna otra en el mundo. Desde sus diferentes miradores, te impresionará el ensordecedor ruido del agua y apreciarás el poder de la naturaleza en su estado más salvaje. ¡Impresionante!
De todos es sabido que Nueva York es la meca para los amantes del arte. Considerado por muchos como uno de los museos más prestigiosos del panorama artístico actual, el MoMa (Museo de Arte Moderno) ofrece más de 200.000 obras repartidas en sus seis plantas. No debes perderte obras imprescindibles como "La noche estrellada" de Van Gogh, "Las Señoritas de Aviñón" de Picasso o "La Persistencia de la Memoria" de Dalí.
Una de las actividades más emocionantes y deseadas que puedes realizar en tu visita a la ciudad, es un paseo en helicóptero por Manhattan. Sobrevolando Central Park, el Empire State, el Chrysler Building o la Estatua de la Libertad, se obtienen unas vistas imposibles desde cualquier otro lugar, que hará que no sepas hacia dónde mirar y que marcará el resto de tu viaje. Tener la Gran Manzana a tus pies, no tiene precio. ¿Listo para volar?
Desde hace algunos años, Estados Unidos se ha convertido en la cuna del resurgir de la cerveza artesanal, siendo el estado de Nueva York uno de los mayores productores del país con unas 400 fábricas. Si estás buscando uno de los “places to be”, viendo arte urbano, comiendo una de las mejores pizzas y degustando cervezas artesanales de calidad, Bushwick es el lugar. Ubicado en el distrito de Brooklyn — el más poblado y bohemio de los cinco que conforman Nueva York— es un barrio de clase obrera que, desde hace algunos años, se ha convertido en un lugar de moda habitado por artistas y con una floreciente vida social. Para llegar, toma la Línea L desde Manhattan hasta Jefferson St. y luego camina un par de manzanas hasta St. Nicholas Avenue… no tiene pérdida. Una vez allí, no puedes perderte las riquísimas pizzas de Roberta’s ni las cervezas artesanales de KCBC y de Brooklyn Brewery.
