LA QUINTA AVENIDA

Si hay una calle famosa en Nueva York, esa es la glamurosa Quinta Avenida. Conocida también como la avenida de los millonarios, recorre Manhattan de norte a sur —como todas las avenidas de la ciudad— y sus apartamentos, tiendas de moda y boutiques se alquilan a precios prohibitivos, de los más caros del mundo. Esta importante arteria nace en Washington Square Park, en el Greenwich Village y discurre hacia el norte a lo largo del centro de Midtown, paralela a Central Park. Cuando pasees por ella, podrás encontrar famosos museos como el Metropolitan Museum, el Museo de Historia Natural o la famosa joyería Tiffany’s, donde Audrey Hepburn desayunaba frente a su escaparate en la oscarizada película “Desayuno con diamantes.

THE WHITE HOUSE

La Casa Blanca es la residencia del presidente de los Estados Unidos y, probablemente, el organismo oficial más famoso y reconocible del mundo. De estilo paladino e inspirada en la residencia de los Duques de Leinster en Dublín, fue construida en la década de 1790 por mandato de George Washington y forma parte de la memoria colectiva de los aficionados al cine, a las series de televisión y a la historia. En sus dependencias públicas, se pueden observar muebles y otros objetos históricos que reflejan los gustos de los diferentes inquilinos que la han habitado a lo largo de más de dos siglos. Si quieres visitarla por dentro, tendrás que planificarlo con mucho tiempo de antelación, puesto que las medidas de seguridad son muy estrictas, pero merece la pena.

PUENTE DE BROOKLYN

De todos es sabido que el puente de Brooklyn es uno icono de Nueva York y uno de los más famosos del mundo. Ya sea cruzar sus casi dos kilómetros a pie o en bicicleta, es algo que no deberías perderte. Disfrutarás de unas vistas insuperables del sur de Manhattan, sintiendo la brisa del East River en tu cara: una experiencia inolvidable. Para reponer fuerzas, te sugerimos probar la pizza de Grimaldi’s, justo debajo del puente, de las mejores de la ciudad.

MUSEO NACIONAL DEL AIRE Y EL ESPACIO

El National Air and Space Museum es uno de los 15 museos que forman el Smithsonian Institute, cuya exposición de aviones y naves espaciales es la más grande y visitada del mundo. Fundado en 1976, su entrada es gratuita y alberga una impresionante colección de naves que han sido fundamentales en la historia de los Estados Unidos y de la aviación mundial. Allí podrás encontrar el famoso “Spirit of Saint Louis”, un aeroplano pilotado por Charles Lindbergh, quien en 1927 se convirtió en el primer piloto en cruzar el Atlántico en un vuelo sin escalas de más de 5.800 km. ¡Una hazaña increíble para la época!

CONEY ISLAND

En tu tiempo libre en Nueva York, te recomendamos visitar Coney Island, un barrio residencial de Brooklyn, a apenas una hora en metro desde Manhattan, que se convierte en un fantástico destino de ocio todos los veranos. En su paseo marítimo encontrarás tiovivos, montañas rusas, espectáculos circenses de lo más variopinto y un agradable olor a algodón de azúcar que te embaucará y transportará de inmediato a escenas de principios del siglo XX. Si buscas emociones fuertes, no debes perderte la mítica Cyclone, una montaña rusa de madera construida en 1927, donde despertarás la adrenalina.